'Los malos recuerdos te persiguen sin necesidad de llevarlos contigo'
'El tiempo no existe, por eso no hay que perderlo'
'Nada tiene tanta fuerza como una promesa'
Hoy traigo de nuevo al maravilloso autor Carlos Ruiz Zafón. Hace tiempo escribí una reseña de otro libro suyo, Marina. Esta es otra de sus famosas novelas que merece muchísimo la pena.
Si se observa el ejemplar desde fuera, se puede ver la portada. La imagen muestra un faro y un barco hundido, en un paisaje de costa oscuro. Todos estos elementos tienen un gran significado en la historia: Max es un joven de trece años que se muda a un pueblo de costa por motivos de la guerra. La nueva casa donde viven, cerca de un cementerio de estatuas, está llena de misterio ya que ahí aún se respira el espíritu de Jacob, hijo de los antiguos propietarios, que murió ahogado en la orilla del mar. Jacob y su hermana, Alice, conocerán a Roland y se harán muy amigos. Pero de repente se verán involucrados en el misterio del diabólico Príncipe de la Niebla, que es capaz de conceder cualquier deseo a una persona a un precio que nadie quiere pagar.
Esta novela de suspense y terror está tan bien escrita y narrada que es casi imposible dejar de leer
una vez que se ha comenzado. Tiene las suficientes descripciones para hacer que uno se sienta
dentro del libro. En las noches que yo lo estaba leyendo, me intrigó muchísimo porque tiene escenas de mucho miedo. Los personajes están muy bien creados. Max, el protagonista, es un chico curioso y con el que el lector es capaz de entablar cierta empatía con él, ya que sus acciones parecen estar pasándole al que lo lee. Roland por las descripciones me encantó y Alice es agradable aunque tampoco se mencione mucho su forma de ser. Víctor Kray, el supuesto abuelo de Roland, es el único que sabe la verdad sobre el misterio de Caín (El Príncipe de la Niebla) y esconde un tenebroso pasado del que prefiere no hablar. Si hay algo que tengo que admitir es que Caín, personaje principal de las escenas capaces de erizarte la piel, me gustó. Es uno de mis antagonistas literarios preferidos.
Lo recomiendo sin lugar a dudas.